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sábado, 19 de septiembre de 2009

Niños en situación de calle

Investigación
Aproximaciones a la caracterización de la problemática de los niños/as en situación de calle y los factores o situaciones (familiares y sociales) que inciden en la misma, desde la perspectiva del Trabajo Social.
-El caso de la ciudad de Pergamino, provincia de Buenos Aires, en el primer semestre del año 2009-
Resumen
El objetivo general de la investigación se orienta a conocer el estado actual de la problemática de los niños en situación de calle en la ciudad de Pergamino y relevar situaciones familiares y sociales que inciden o favorecen dicha situación.
La investigación se realiza en el marco de un acuerdo entre el Municipio de la ciudad de Pergamino y el Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5. Participan del mismo dos alumnos y tres ex alumnos de la Carrera de Trabajo Social, coordinados y supervisados por el docente de la Cátedra Trabajo Final de la nombrada carrera.
El período de observación y recolección de datos se extiende entre los meses de marzo y mayo de 2009.
La presente investigación es de tipo descriptiva, prospectiva y transversal y se encuadra metodológicamente en la triangulación, es decir se utilizan los encuadres metodológicos cuantitativo y cualitativo, para enriquecer el abordaje del fenómeno.
Resultados
Durante el trabajo de campo realizado en los meses de marzo a junio del 2009 en la ciudad de Pergamino, se pudo observar tanto a niños como a niñas en situación de calle provenientes de barrios carenciados. Sus edades se encuentran comprendidas entre el año y los 16 años de edad, siendo los mas pequeños acompañados por sus madres.
La mayor cantidad oscila entre los 8 y 12 años de edad, y se ha observado que hay mas niños que niñas que realizan esta actividad.
Los lugares más utilizados para practicar sus actividades de supervivencia son: Supermercados y alrededores, puertas de Bancos, semáforos, inmediaciones del Bingo, Plaza Merced y peatonal.
En cuanto a la evolución del fenómeno, se observó un aumento de casos a medida que se avanzó con el trabajo de observación lo cual puede deberse a la situación económica actual que se ve cada vez mas deteriorada.
La frecuencia con que realizan la actividad es variada ya que algunos realizan la actividad a diario y otros no, a su vez se puede agregar que no todos se encuentran siempre en el mismo lugar de “parada”. En el caso de quienes se encuentran en los ingresos de supermercados, lo hacen por la tarde y tanto días de semana como fines de semana; los que se sitúan en lugares aledaños a las avenidas del centro de la ciudad, citadas en la investigación, lo hacen en horarios nocturnos y se observa mayor presencia de estos chicos/as los fines de semana. Esto se debería a que recorren la ciudad buscando el lugar acorde según el momento del día, que le permita acceder a recursos para cubrir sus necesidades, es decir algunos rotan según la conveniencia en cuanto a cantidad de gente que circule por el lugar o no.
Otro dato a tener en cuenta es que generalmente están en la calle en contraturno al horario de escolaridad. Y se cree según observaciones a priori, que aumenta el número en período de receso escolar.
Entre las actividades de supervivencia que realizan en la calle, tomadas por algunos como “trabajo”, la más practicada es la mendicidad, seguida del cuidado de autos, venta de estampitas y trabajos informales como limpieza de veredas y/o vidrieras de comercios, mandados. La mendicidad se trataría de dinero, y en otros casos de mercadería, ropa y algún otro tipo de ayuda que puedan obtener (éstas últimas solicitadas sobre todo por quienes se encuentran acompañados de bebés o por niños pequeños). Y la modalidad de práctica es más frecuente en lugares públicos, registrándose casos de práctica de la mendicidad por domicilios, de zona céntrica y llevada a cabo por los niños más pequeños solos o acompañados de su madre. El objetivo de estas prácticas es satisfacer necesidades inmediatas y sobre todo, aportar al sustento del hogar.
Las opiniones de las familias son variadas, algunas lo perciben como un trabajo, del cual obtienen su ingreso, otras alegan que no pueden manejar a sus hijos, que tienen otros niños/as para cuidar y están las que lo ven como una actividad natural, una forma de vida que les brinda una ayuda económica.
Por otro lado los profesionales consultados de alguna u otra forma han intervenido en estos casos, tanto visitando a las familias, citando a los padres para hablar con los mismos e intentar que tomen conciencia respecto a su función, a los riesgos a los que están expuestos sus hijos, los derechos que tienen como niños. A esto se agrega la asistencia por parte del Estado que se les ha brindado a la mayoría de éstas familias, que consiste en: Pensión por Madre de 7 hijos, Plan Más Vida, SAE y asistencia al CAP y CDC. Estas intervenciones del Estado están destinadas a satisfacer necesidades inmediatas de ésta población beneficiaria, no obstante no resultan como solución para revertir la situación de las familias, a modo de evitar la mendicidad.
En todos los casos los niños/as poseen familia de referencia, se trata mayormente de hogares conyugales con la presencia de padrastros y el resto, de hogares monoparentales con madres a cargo del hogar (soltera o con su pareja en prisión). Si bien hay casos de familias numerosas (10 hijos), no en todos se cumple el mismo patrón, hay familias con menor cantidad de hijos.
Los niños/as referenciados/as están insertos en el núcleo familiar, aunque los vínculos no son los adecuados a sus necesidades, ya que como característica de niño/a y/o adolescentes por ser vulnerables, necesitan de protección y ser proveídos para satisfacer sus necesidades, en cambio pasan a ser proveedores de recursos que por diversos motivos le son negados; buscando cubrir sus necesidades materiales y simbólicas a través de trabajos informales, mendicidad, recursos que aportan las instituciones.
También encuentran referentes significativos, como por ejemplo vecinos que viven o trabajan en la zona, que en ocasiones los ayudan.
En cuanto a la situación económica de sus familias: en el caso de las madres que mendigan junto a sus hijos son desempleadas, refiriendo que se debe a la imposibilidad de conseguir empleo, tomando a la mendicidad (junto a los planes sociales) como único medio de subsistencia, y; en el caso de los grupos de hermanos que se encuentran en situación de calle tienen a sus referentes familiares a cargo, ocupados en el sector informal y/o con Plan Jefe de hogar. Por lo cual es muy importante el ingreso que llevan los chicos al hogar.
En la mayoría de los casos los niños/as y sus familias han asistido al CDC o CAP de su barrio para recibir algún tipo de asistencia, pero no es continuo su contacto con estas instituciones.
Respecto a la escolaridad: se encuentran escolarizados. En algunos casos los chicos forman parte de la matrícula de la Escuela, pero no asisten a diario.
Teniendo en cuenta la población total de la ciudad de Pergamino, se puede decir que el fenómeno aún no ha afectado a gran cantidad de personas, debido a que se registraron 28 casos procedentes de 13 familias que se encuentran en esta situación. En tal sentido, los datos resultan alentadores a la horade pensar en medidas para revertir la situación.
Se aclara que los resultados alcanzados, responden a la población observada en el período de referencia consignado.
Informe presentado al Sr. Intendente Municipal Dr. Héctor María Gutiérrez el 13 de julio de 2009.

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