Año Nuevo, Vida Nueva

“Año Nuevo, Vida Nueva”, era lo que escuchaba en mi infancia repetidamente, al finalizar cada año en el momento del brindis. Como siempre nos sucede, todo lo que no entendemos de niños, lo empezamos a valorar de adultos. En aquel entonces era una frase más que no cobraba ningún sentido fuera de lo común. Con el pasar de los años, como me pasa a menudo, me sorprendo al escucharme diciéndola yo, y seguramente los más pequeños de la familia pensarán de qué habla éste.
¡Qué hermoso deseo! Año Nuevo, Vida Nueva; para doblegar nuestra rutina diaria, vida nueva o renovada para que se haga menos duro enfrentar lo mismo cada vez que un ciclo culmina y otro comienza. Año nuevo para que podamos atrevernos a más, a dar con menos mezquindad, a ampliar nuestros horizontes, a sincerarnos con los demás, y así, lo que cada uno de ustedes agregue a sus propósitos para el próximo año.
Con este decir popular quiero despedirlos y despedir al 2010, que ha sido un año colmado de realizaciones exitosas, agradeciendo a todos y cada uno de los que confiaron porque supieron captar el espíritu e intencionalidad del trabajo y lograron plasmarlo en proyectos tangibles. Por un Año Nuevo, y una Vida Nueva, con el convencimiento de que el esfuerzo debe venir de nosotros mismos, el año no es más que el sustento que nos regala el tiempo.
¡FELIZ 2011!